En los espacios donde la comunidad se encuentra, crece y convive, la Policía Comunitaria continúa fortaleciendo lazos de confianza mediante acciones pedagógicas que buscan transformar realidades y promover territorios seguros. En esta ocasión, el grupo desarrolló una campaña educativa orientada a prevenir el consumo de sustancias alucinógenas, una problemática que impacta directamente a las familias y al bienestar social.

La jornada incluyó charlas cercanas con comerciantes, transeúntes y residentes, donde los uniformados compartieron recomendaciones prácticas para identificar comportamientos de riesgo, actuar oportunamente y proteger a los jóvenes frente a este delito que afecta la salud y la convivencia. Asimismo, se ofrecieron pautas para mantener condiciones adecuadas de higiene en establecimientos y espacios públicos, disminuyendo factores que puedan representar un peligro para la comunidad.

Como parte del compromiso institucional, se socializó el número de contacto de la Zona de Atención Policial 1, recordando a la ciudadanía que cualquier requerimiento o situación sospechosa puede ser reportada de manera inmediata, confiando en la respuesta oportuna de las autoridades.

La subteniente Andrea Ibañez, jefe del grupo de Policía Comunitaria, expresó:
“Cada diálogo, cada orientación y cada espacio educativo son pasos firmes hacia una comunidad más informada y protegida. La prevención es una tarea que construimos entre todos: policía, autoridades y ciudadanía. Solo unidos podemos garantizar una convivencia sana y un entorno más seguro para nuestras familias.”

La Policía Metropolitana de Montería reafirma su compromiso con el trabajo articulado y el bienestar colectivo, fortaleciendo la cultura del autocuidado y la corresponsabilidad para seguir construyendo territorios de paz y seguridad.